Juanjo Montiel es ciego desde bebé y aprendió a programar a los 15 años de forma autodidacta. La tecnología ha dado alas a su obsesión por romper barreras. Hace un año cumplió su sueño profesional: fue fichado por Microsoft para trabajar como desarrollador en Irlanda
Talento ‘tech’ malagueño a prueba de obstáculos
