Se puede afirmar, sin riesgo de equivocarnos, que el turismo es la principal industria de Málaga. Solo hay que echarle un vistazo a los datos. Es un sector que representa el 18% de las personas ocupadas en la provincia y que generó más de 19.000 millones de euros de impacto económico en 2023.
Málaga ya es uno de los destinos preferidos por los viajeros, tanto nacionales como internacionales. Precisamente, el año pasado fue el mejor turísticamente hablando para la Costa del Sol. El territorio acogió a 14 millones de turistas, un millón más que en 2019, año hasta ahora de referencia para el turismo malagueño.
Pero el boom turístico de Málaga ha eclosionado recientemente. Hace diez años, en 2014, fue la primera vez que la provincia superó los diez millones de turistas. Si hablamos de empleo, Turismo Costa del Sol registró aquel año 89.000 trabajadores turísticos; cifra que ascendía hasta más de 124.000 empleados solo durante el primer trimestre de 2024.
“Son muchas familias las que trabajan en el turismo. Todos vivimos lo que pasamos con la pandemia. Si no hay turismo, no habrá empleo ni sueldos”, Jacobo Florido, concejal de Turismo del Ayuntamiento de Málaga
Un futuro prometedor
Málaga está de moda, y es algo que se refleja en todos los indicadores. Previsiones recientes del INE sitúan a Málaga como la provincia más poblada de Andalucía en siete años, cuando se estima que supere los dos millones de habitantes. Junto al turismo, la tecnología es otra actividad que ha experimentado un gran desarrollo en poco tiempo. Según la oficina Málaga Open For Business, del ayuntamiento de la ciudad, Málaga ha conseguido atraer en los últimos cinco años a 90 multinacionales tecnológicas que han generado 7.000 nuevos empleos.
“Somos privilegiados. La demanda y el consumo que hay en toda la Costa del Sol gracias al turismo es tremendo comparado con cualquier otra plaza que busquemos de interior”, Salvador Pérez, presidente de Málaga Comercio
Impacto económico del turismo
El desarrollo del turismo es un reflejo más de la transformación en la que está sumida la provincia y la ciudad desde hace unos años. De hecho, la propia actividad turística interviene en este crecimiento generalizado. “Málaga es una provincia que es muy consciente de lo que le debe a la actividad turística. Lo que el turismo mueve tiene implicación en el crecimiento económico de otros sectores de actividad”, señala Natalia Sánchez, vicepresidenta ejecutiva de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM). El presidente de la Diputación Provincial, Francisco Salado, cifra en 5.202 millones de euros el impacto del turismo en el transporte, y en casi 3.000 millones su impacto en la industria.
De hecho, dentro del transporte, el Aeropuerto de Málaga es uno de los grandes actores que crece a la par que el turismo malagueño. “El Aeropuerto no decide cuál es su volumen de pasajeros. Eso lo decide el acuerdo que hay entre la demanda, que es la sociedad, y las compañías aéreas que deciden satisfacer esa demanda”, explica Pedro Bendala, director del Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol. También participa en el crecimiento de la provincia. “Ofrece buena conectividad que permite que muchos sectores puedan generar valor”, afirma Bendala. “Todas esas empresas que se instalan en Málaga tienen muy buena conexión con sus oficinas de origen”.

¿Turismofobia en Málaga?
Sin embargo, el turismo, actor fundamental en Málaga, se ha visto últimamente tensionado por el fenómeno de la turismofobia. ¿Existe realmente la Málaga turismofóbica? “En Málaga no hay turismofobia. El malagueño es acogedor y está encantado de recibir a gente de todo el mundo. Es un valor añadido de nuestra oferta”, señala Salado. “Gracias a la actividad turística han progresado, estudiado y emprendido miles y miles de malagueños”.
Si acotamos los datos a la capital de la Costa del Sol, la ciudad alberga el 36% de los empleos turísticos de la provincia. Jacobo Florido, concejal de Turismo en el Ayuntamiento de Málaga, afirma que la gran mayoría de los malagueños están a favor de esta actividad en la ciudad. “Son muchas familias las que trabajan del turismo”, destaca. “Todos vivimos lo que pasamos con la pandemia. Si no hay turismo, no habrá empleo ni sueldos”.

Según el último balance turístico ofrecido por el ayuntamiento de la capital, casi 30.000 personas han trabajado en la restauración de la ciudad malagueña durante el primer trimestre de 2024. A nivel provincial, la hostelería rompió el pasado mes de junio su récord histórico de contratación, con 108.390 personas dadas de alta. Mahos, la Asociación de Hosteleros de Málaga, prevé que se alcance el hito de 115.000 contratos en agosto.
“Hace pocos años vivimos una situación por la que sabemos que podemos tocar suelo sin turistas”, declaraba Javier Frutos, presidente de Mahos, durante la presentación de una nueva campaña con el objetivo de dar la bienvenida al turista. “Parece que estamos hace 40 años, cuando se lanzaron las campañas ‘Al turismo, una sonrisa’”.
En este sentido, tanto Frutos como Florido advierten de que el flaqueo del turismo en Málaga puede ser una buena oportunidad para el aumento de esta actividad en países competidores vecinos.

Hacia un modelo de turismo sostenible
El desarrollo de la actividad turística en Málaga no solo ha dejado récords en los datos numéricos; también ha potenciado nuevas formas de practicar turismo. “Empezamos a notar que estamos rompiendo la estacionalidad”, apunta Natalia Sánchez, de la CEM. “Ese es probablemente el principal hito: que hayamos conseguido que nuestro destino, asociado al sol y playa, se haya diversificado”.
El golf, el turismo sanitario y de bienestar, el turismo cultural (no hay que olvidar que a Málaga también se la conoce como ‘la ciudad de los museos’), el turismo MICE, el gastronómico o el turismo de cruceros son algunas de las variantes de este sector que los turistas pueden disfrutar.
«El sector turístico está firmando resultados históricos desde su recuperación post pandemia. Pero se enfrenta, indudablemente, a retos que deben atenderse para garantizar su futuro», Natalia Sánchez, vicepresidenta de la CEM
En concreto, el Puerto de Málaga superó el año pasado los 510.000 viajeros anuales. “Estamos en una cifra en la que creo que tanto nosotros como la ciudad nos encontramos cómodos, entre 500.000 y 700.000 pasajeros”, manifiesta Carlos Rubio, presidente de la Autoridad Portuaria de Málaga. “Es perfectamente asumible tanto por el puerto, porque tenemos tres terminales de cruceros, como por la ciudad, porque nuestras épocas de temporada alta son otoño y primavera”. De esta manera, el recinto portuario desarrolla un turismo sostenible al no coincidir con el gran flujo de visitantes en la ciudad, que se da en los meses de verano.

Precisamente, ese es el camino que apoyan las distintas administraciones y agentes del turismo en Málaga para solucionar la oleada de malestar en la población o turismofobia: buscar que la actividad turística sea sostenible en el tiempo. “Málaga está experimentando una gran transformación en muchos ámbitos, lo que plantea algunos retos a los que las administraciones públicas tienen que hacer frente”, asiente Francisco Salado. “En nuestro caso, estamos desarrollando políticas turísticas basadas en la sostenibilidad y el respeto al territorio”.
También para Natalia Sánchez, el crecimiento experimentado por Málaga en los últimos años ha producido una serie de desafíos que se deben abordar. “Nuestra provincia ejerce un ‘efecto llamada’ sobre personas de otros puntos de España y del extranjero que quieren venir aquí a vivir durante unos meses al año. Eso genera una serie de retos, que van asociados, en primer lugar, a la vivienda”.
La vicepresidenta ejecutiva de la CEM apunta a la colaboración público-privada como fórmula para abordar estos desafíos. “Yo creo que es algo factible. De hecho, si algo caracteriza a la provincia de Málaga es que el crecimiento que hemos tenido, sobre todo en torno a la capital, ha sido fruto de la cooperación público-privada”.

Cambio en el modelo turístico
Málaga no será el primer destino turístico en abordar esta gestión ni en esbozar un cambio en su modelo turístico. “Es un debate que tiene que hacer todo territorio. Lo están haciendo los grandes destinos turísticos del mundo”, señala Pedro Bendala, director del Aeropuerto de la Costa del Sol. Para él, la clave está en no perder el valor del turismo en Málaga. “Nosotros somos parte del turismo y parte del valor. Y es una cosa que tenemos que gestionar: que ese valor no se pierda. Yo creo que cuando hay crítica al turismo, realmente es crítica a la pérdida del valor del turismo”.
El director del aeródromo de Málaga se decanta por una regulación por parte de las administraciones. “Habrá quien lo vea por la regulación vía mercado o por la regulación vía normativa, pero debemos tener unas normas para que no se pierda esta generación de riqueza que estamos obteniendo con el turismo”.
“El problema del turismo es del modelo. Hay un cansancio de una parte de los ciudadanos que se sienten afectados por el modelo turístico” Gonzalo Fuentes, ex secretarioo nacional de Turismo de CC.OO.
Poniendo límites al crecimiento desmesurado
Un histórico de la actividad turística malagueña, Gonzalo Fuentes, opina que en Málaga no existe turismofobia, pero sí es necesario poner límites al crecimiento de la turistificación. “Es un problema del modelo turístico actual”, afirma el sindicalista malagueño de Comisiones Obreras (CC.OO.), que ha dejado recientemente su cargo como secretario sectorial de Hostelería y Turismo en CC.OO. a nivel estatal.
Según fuentes, existe un cansancio de la ciudadanía malagueña debido al modelo turístico. “Viviendas turísticas sin límite, eso es una barbaridad. Hoteles sin límite, otra barbaridad. Es un crecimiento insostenible”.
De hecho, el aumento de la vivienda turística en Málaga es el principal argumento de la ciudadanía en contra del turismo. “Esa proliferación desmesurada de las viviendas de uso turístico está produciendo esa sensación de turismofobia en la sociedad”, apunta Lola Villalba, secretaria general del sindicato de Servicios de CC.OO. en Málaga.

Necesidad de regulación
Desde CC.OO. abogan por una regulación de los pisos turísticos. “En Málaga hay que regular la vivienda turística. No puede seguir creciendo a estos niveles”, manifiesta Gonzalo Fuentes. El sindicalista destaca cómo los barrios malagueños y los locales comerciales se están convirtiendo en pisos y apartamentos turísticos.
“Siempre hemos hablado desde el sindicato de un turismo sostenible. Un turismo donde haya un desarrollo con tiempo para que no se nos vaya de las manos, para que Málaga no se convierta en un parque temático”, añade su compañera Lola Villalba, de CC.OO. en Málaga. “Yo creo que hay que sentarse a hablar con los sindicatos, los empresarios y los consumidores, y buscar un modelo en el que sea compatible el turismo con una buena ciudadanía”, confirma Fuentes.
“Hace pocos años vivimos una situación por la que sabemos que podemos tocar suelo sin turistas. Parece que estamos hace 40 años, cuando se lanzaron las campañas ‘Al turismo, una sonrisa”, Javier Frutos, presidente de Mahos
Acciones del Ayuntamiento
En este asunto, el Ayuntamiento de Málaga ya ha llevado a cabo algunas acciones para regular las viviendas turísticas, como establecer que deben tener una entrada independiente. “Eso frena absolutamente ahora mismo la posible inscripción de nuevas viviendas turísticas”, afirma el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre.
En relación a la construcción de viviendas VPO, el regidor apunta que Málaga “es la ciudad de España que más esfuerzo ha hecho en materia de vivienda pública por habitante en los últimos 20 años”.
Impacto del turismo en la sociedad
El turismo es un claro dinamizador de la economía malagueña. Y, al son del resto de la provincia, no ha parado de crecer de forma estratégica. De hecho, el turismo representa entre el 15% y el 20% del PIB de la provincia. En 2023, el impacto económico que dejó esta actividad en Málaga ascendió en 5.000 millones de euros en relación al dato de 2019. “Es una actividad que sufre como la que más las crisis, pero también es de las que nos ayudan a salir antes de esas situaciones”, destaca Natalia Sánchez, vicepresidenta de la CEM.
“En Málaga no hay turismofobia. El malagueño es acogedor y está encantado de recibir a gente de todo el mundo. Es un valor añadido de nuestra oferta”, Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga
La vivienda: el gran problema
Parece que el movimiento en contra del turismo que se ha generado recientemente en Málaga es, realmente, una respuesta a la falta de vivienda asequible. Sin embargo, las fuentes consultadas para este reportaje advierten que no hay que confundir el problema de la vivienda en Málaga con la industria turística. “Es verdad que Málaga tiene un problema de vivienda”, apunta Javier Frutos, presidente de Mahos. “También lo estamos sufriendo nosotros, incluso los propios trabajadores. Pero creo que mezclar el problema de la vivienda con el turismo es una bomba que quizás se está utilizando ideológicamente”.
En este punto, la mayoría coincide en que la solución pasa por construir más viviendas destinadas al alquiler y la compra, sobre todo VPO. “Ha habido mucho tiempo en el que las distintas administraciones no han puesto el foco en la generación de VPO”, apunta Natalia Sánchez, vicepresidenta de la CEM. Destaca también otras variables que influyen en la escasez de vivienda, como las largas y lentas tramitaciones para poder construir o la inseguridad jurídica de los propietarios a la hora de poner su vivienda en alquiler de larga duración.
En estos últimos factores está de acuerdo Juan Cubo, vicepresidente de AVVAPRO, la asociación de profesionales de viviendas turísticas de Andalucía. Sin embargo, afirma que las viviendas turísticas representan solamente un 2,7% en Málaga. “Hay 7.000 viviendas turísticas y 38.000 vacías o que solo se utilizan un mes al año”, afirma Cubo, basándose en datos recientes del INE. “¿Por qué no trabajan nuestras administraciones para que esas 38.000 viviendas vacías se pongan en el mercado?”, se pregunta. Achaca la inutilidad de esas viviendas a la “inseguridad tan brutal que hay ahora mismo en el mercado de larga duración”.
8 beneficios del sector turístico
Mucho más allá del protagonismo laboral, la industria turística en la Costa del Sol genera un viento a favor para el entorno empresarial de la provincia.
1.Crea empleo
Antonio Díaz, director de Turismo Costa del Sol, destaca que el turismo genera casi 128.000 empleos en la provincia, lo que supone el 18% del total de las personas ocupadas. Solamente la hostelería registró en junio 108.390 personas dadas de alta. Por su parte, el sector hotelero suma unos 27.000 trabajadores a nivel provincial. “Y a nivel de impacto económico directo de la actividad hotelera, lo ciframos en unos 5.500 millones de euros”, señala Javier Hernández, vicepresidente ejecutivo de Aehcos.
2.Impacta en otros sectores
El turismo participa activamente en el desarrollo de otras actividades económicas de la provincia. “El turismo ha generado ingresos significativos en varios sectores, alcanzando, según los últimos datos, un total de 14.233 millones de euros. Esto incluye 337 millones en el sector primario, 2.788 millones en la industria y 5.202 millones en el transporte”, desglosa Díaz.
3.Genera impuestos
La actividad turística también recoge diferentes impuestos para mejoras municipales. “Los impuestos y tasas locales que pagan los establecimientos de alojamiento turístico llegan a ser en algunos territorios el 10% de los presupuestos municipales”, afirma Javier Hernández, vicepresidente ejecutivo de Aehcos. “Con los impuestos del turismo se sufragan muchísimos servicios públicos, subvenciones y ayudas”, añade Juan Cubo, vicepresidente de AVVAPRO.
4.Mejora las infraestructuras
El desarrollo del turismo en un territorio posibilita mejoras sustanciales en las infraestructuras locales, como nuevas carreteras, rehabilitación de edificios en desuso, mejores servicios públicos, o un aumento de las conexiones. En este punto se puede destacar la llegada a Málaga de la Alta Velocidad ferroviaria o el crecimiento del Aeropuerto, uno de los que más conexiones tiene de España. “También para que los propios residentes puedan viajar al exterior”, apunta Javier Hernández.
5.Atrae nuevas empresas, sectores y talento
El turismo ha posibilitado que Málaga se abra al mundo. Como consecuencia, la ciudad y la provincia se han convertido en receptoras de nuevas compañías y talentos, sobre todo relacionados con el ámbito tecnológico. “Málaga se ha convertido en un territorio al que hay que llegar”, destaca Pedro Bendala, director del Aeropuerto de la Costa del Sol.
6.Hace crecer la población
Paralelamente al crecimiento del territorio y la llegada de tejido empresarial, se está produciendo un aumento de las personas residentes en Málaga. “Vienen muchos visitantes que finalmente se quedan a vivir aquí”, indica Natalia Sánchez, vicepresidenta de la CEM. Es lo que define Javier Hernández como “el carácter prescriptivo de la actividad turística”. “Alguien que nos visita y queda encantado con el territorio, muchas veces genera actividad residencial”, explica el vicepresidente de Aehcos.
7.Contagia al interior
Hace décadas, lo que más se conocía de Málaga era la Costa del Sol. “Era lo que internacionalmente tenía más reconocimiento. Ahora, también la capital”, analiza Carlos Rubio, presidente de la Autoridad Portuaria de Málaga. “Al final hay un efecto contagio, y todas esas personas que visitan la provincia van conociendo cada vez más la oferta del interior”.
8.Fomenta la interculturalidad
La mezcla de culturas, orígenes e idiomas es otro valor añadido del turismo malagueño. “Yo prefiero una ciudad abierta y cosmopolita donde pueda sentarme a charlar con un señor alemán”, señala Juan Cubo. “Se aprenden idiomas y se da ese intercambio cultural que siempre se ha considerado tan bueno”.
El tejido económico opina
Violeta Aragón, secretaria general de la ACP
Solo un turismo desbocado enturbia los muchos beneficios que esta industria tiene en el territorio, haciendo que la población residente perciba amenazada su identidad. Es prioritaria una gobernanza turística público-privada con iniciativas que permitan al sector avanzar hacia un desarrollo turístico que equilibre las experiencias de los visitantes con el beneficio social de los locales».
Pablo Gonzalo, socio de El Pimpi
Hay muchas formas de solucionar los problemas que la evolución de la ciudad haya creado a los ciudadanos sin tener que lanzar piedras sobre nuestro propio tejado. Cultivar la turismofobia por el problema de la vivienda utilizándolo como arma política no creo que sea la forma más sensata de actuar. Apostemos por un turismo de calidad y sostenible, y todos los malagueños ganaremos».
Pedro Bendala, director del Aeropuerto de Málaga-costa del sol
Málaga era una sociedad de emigración. Hasta hace no muchos años, de Málaga se salía. Gracias al fenómeno turístico, a Málaga se viene. Los residentes ya no tienen que buscarse la vida en otros territorios. Ahora viene gente a vivir, y talentos, empresarios y emprendedores que fijan población y nos hacen ser más competitivos y valiosos».
Alberto Benito, decano del Cuerpo Consular de Málaga
A nadie se le escapa que el éxito siempre tiene algunas complicaciones. En este caso, tener una provincia atractiva al mundo implica que cada vez son más los que quieren visitarnos. En esa realidad, la actividad consular también ha requerido de un cambio y un replanteamiento de estrategia».
Antonio Guevara, decano de la Facultad de Turismo de la Universidad de Málaga
La planificación turística es fundamental para continuar con el gran trabajo realizado en Málaga en los últimos años. Este ámbito de conocimiento es la única forma en la que pueden afrontarse los retos. Solo la planificación nos permitirá un mejor modelo turístico para que se potencie un aspecto fundamental: el equilibrio con los residentes».
Francisco Salado, presidente de la Diputación Provincial
Cualquier cambio de envergadura conlleva oportunidades y riesgos. Ante esta situación hay dos opciones: cruzarse de brazos y mirar para otro lado o actuar para adelantarse a las necesidades de la provincia. Tenemos claro que optamos por la segunda opción, y por eso demandamos y trabajamos para dotar a la provincia de los recursos e infraestructuras que se necesitan».
Carmen Jiménez, coordinadora de derecho turístico en la Abogacía de Málaga
Málaga siempre fue una ciudad abierta, y las mezclas con foráneos han sido habituales. Pero la situación está descontrolada. Hay un crecimiento exponencial global del turismo y se hace necesario una ordenación urbanística y de infraestructuras que asegure la sostenibilidad de los recursos y el derecho a las ciudades de sus habitantes”.
Carlos Rubio, presidente de la Autoridad Portuaria
Tanto la ciudad como la provincia están absorbiendo muy bien el turismo, y creo que tenemos capacidad para seguir absorbiendo crecimientos futuros, porque la oferta es cada vez mayor. No olvidemos nunca que es nuestra principal industria. Es una buena noticia que Málaga se esté consolidando como un foco de atracción de turismo».
Rodrigo Bocanegra, presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico
Nuestro centro histórico, al igual que la ciudad, ha evolucionado de una forma muy drástica en muy poco tiempo. Esto ha llevado a una difícil adaptación del malagueño, el cual ha dado un paso atrás, cediendo su espacio al turista. Desde el centro histórico estamos consiguiendo demostrar a los malagueños que sigue siendo suyo».
Javier I. Noriega, presidente del Clúster Marítimo-Marino de Andalucía
Málaga es un destino de excelencia gracias a la calidad de las empresas turísticas. Pero también tenemos retos: mejora de infraestructuras, comunicaciones o puertos. Parece que para crear destino es fundamental que el turista tenga experiencias singulares, y en torno a esto, Málaga puede generar un aporte de calidad.»
Ana María García, presidenta de Aesva
No entendemos que la solución pase por culpar ni por eliminar el turismo. Se trata más bien de desarrollar actuaciones adecuadas a las necesidades actuales de la ciudad. Las instituciones públicas deben actuar con urgencia con soluciones efectivas, mejorar infraestructuras, planificando ante futuras necesidades con un enfoque sostenible, y que turismo y ciudadanía puedan convivir conjuntamente».
José Carlos Garín, presidente de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa
Málaga ha cambiado mucho en los últimos 15 años, y movernos por ella en épocas como la Semana Santa se ha complicado. Ignorar la necesidad de afrontar los problemas que para el malagueño esto representa alimentará a los detractores de nuestra principal fuente económica. Es tarea de todos los que tenemos responsabilidad institucional buscar respuestas.»
La entrada El turismo, base de nuestra economía se publicó primero en Vidaeconomica – Revista económica de Málaga.