Un experto habla en COPE de cómo la imitación de los factores de la naturaleza provocan múltiples beneficios en nuestro día a día
La organización mundial de la salud, OMS, cuenta en un informe la importancia de pasar tiempo en la naturaleza, ya que mejora el estado de ánimo, la mentalidad y la salud mental.BENEFICIOS DE LA NATURALEZASalir a las zonas verdes trae consigo actividades como hacer ejercicio o socializar. En este contexto eliminamos el factor que más afecta a la sociedad, así lo explica el profesor en botánica de la Universidad de Málaga, Enrique Salvo Tierra: “No podemos imaginar el beneficio que nos aporta en un mundo donde la tecnología nos hace cada vez más dependiente a una pantalla”.El color verde se vuelve el gran complemento para mejorar nuestro estado de ánimo. “Las escuelas se están empezando a pintar de verde en su interior. El 50 por ciento de la población va a ser miope en el año 30 y la terapia, remedio, que apuntan, es ir al verde, a los paisajes naturales”.Rodearse de la naturaleza hace que aprendamos de ella, así lo expone Enrique Salvo Terra: “Los incendios nos demostraron la capacidad que tenemos de resiliencia. En esa resiliencia hemos visto como esos bosques, que han ardido en años anteriores, han rebrotado rápidamente y han generado más biodiversidad”.ACUMULADORES DE CALOREn la investigación del experto en botánica se estudia el mapa de calor, los lugares donde se acumula el calor, y sorprenden dos que no se esperaban. El primero; los campos de césped artificial: “Son acumuladores de calor de una manera bastante importante”.El segundo, los patios de colegio: “Lo que más nos preocupa son los patios de colegio, no hay nada más alejado de lo que es una zona de confort climático. A los vecinos de los alrededores también les va a afectar”.“En algunos estados de Europa no se cierran ni en verano, ni por la noche, si no que una vez adaptados se consideran refugios climáticos y entonces los vecinos de los alrededores pueden hacer uso de ellos, porque pueden encontrar temperaturas por debajo de los seis grados con respecto a las de sus viviendas”, pone como ejemplo el profesor de botánica de la UMA para mejorar las zonas verdes.